El maíz continúa siendo un punto de conflicto entre agricultores, industriales, avicultores y porcicultores, afectando gravemente a estos sectores y, en algunos casos, repercutiendo en los consumidores. La escasez de stock y el aumento de precios han generado serias complicaciones para quienes dependen de esta materia prima, impulsando solicitudes de importación del grano.

Todos esperan los resultados del censo anunciado por el Ministerio de Agricultura, que proporcionará datos estadísticos sobre la siembra y el consumo nacional, para tomar decisiones informadas.

Estefanía Loaiza, directora ejecutiva de ASPE, ha señalado  a este medio que el stock de maíz disponible es insuficiente, con precios que alcanzan entre 21,50 y 22 dólares por quintal, frente al precio oficial de 16,50 dólares.

Loaiza indica que, a pesar de la promesa del Ministro de Agricultura de otorgar permisos de importación si el precio supera los 20 dólares, no se ha concretado ninguna medida para estabilizar el mercado.

“La situación es crítica, ya que la falta de acceso a maíz o la necesidad de comprarlo a precios elevados incrementa significativamente los costos de producción. Esto, a su vez, se traduce en un aumento del precio final del producto para los consumidores, que podrían enfrentar un incremento de alrededor del 20% en el costo de los productos derivados” dijo.

Necesitamos que el Ministerio de Agricultura publique los resultados del censo para que podamos identificar los lugares donde se encuentra el maíz disponible. No es que no queramos comprar el maíz; si se nos indicara dónde está ubicado y se asegurara que no está acaparado por intermediarios, estaríamos dispuestos a adquirirlo. Sin embargo, llevamos un tiempo lidiando con esta situación y no podemos seguir pagando los precios actuales por quintal, aseguró.

Ante esta situación Ángel TV Noticias, hablo con algunos dirigentes para ver la otra cara de la moneda.

Situación en las Regiones Productoras

A nivel regional, la situación varía considerablemente. En Ventanas, una de las zonas con mayor producción de maíz, Marcia López, comerciante local, asegura que sí hay maíz disponible y que se está vendiendo a 19,50 dólares en Guayaquil a la empresa Pronaca, asegurando que las empresas que deseen pueden ir a adquirirlo.

Por otro lado, Cesar Vizcarra, maicero de Los Ríos, confirma que la región tiene maíz suficiente para el año, aunque reconoce que los problemas de producción han reducido la cosecha en comparación con años anteriores.

“No se trata de especulación, sino de las dinámicas del mercado. Lamentablemente, no se tomaron las medidas adecuadas al inicio de la cosecha, y eso ha llevado a la situación actual. Ya habíamos anticipado que los precios podrían aumentar hasta un 20% o más en comparación con años anteriores debido a varios factores.

En el consejo consultivo, propusimos establecer un precio mínimo y un precio máximo, pero solo se implementó un precio mínimo. Esta falta de regulación ha permitido que los precios suban. No se trata de especulación o de un problema dramático, sino simplemente de las condiciones del mercado. El maíz sigue saliendo y se sigue comprando, reflejando las realidades del mercado actual, y la industria no salio a comprar a tiempo” anotó.

En Manabí, Antonio Delgado señala que aunque hay maíz en los centros de acopio, la cantidad es limitada y la cosecha está en sus últimas etapas. Delgado también menciona que, a pesar de la necesidad de importar maíz, aún no se ha concretado ninguna medida oficial por parte del Ministerio de Agricultura.

A pesar de la promesa del Ministerio de Agricultura de realizar un censo para evaluar la disponibilidad de maíz, los actores del sector aún no han recibido información oficial. La importación de maíz podría tardar hasta dos meses en materializarse, lo que afectaría a los productores ya que en esa fecha estarían en la siguiente cosecha.

Los productores de maíz, como Antonio Delgado, piden una evaluación detallada de la situación para evitar impactos negativos en la cosecha y en el mercado nacional. La falta de comunicación y la demora en las acciones oficiales siguen siendo un tema de preocupación para todos los involucrados