Daniel Noboa tendrá que refrescar su gobierno en el corto plazo, a propósito del inicio del próximo periodo de Gobierno.

En 32 días, Daniel Noboa será posesionado como Presidente de Ecuador para un nuevo periodo, de 2025 a 2029. El primer reto que tendrá es vencer el ánimo de continuismo y refrescar su Gobierno. Los cambios vendrán en los próximos días e incluso el mismo 24 de mayo.

Son cuatro ejes que el Mandatario no podrá descuidar, según expertos consultados por Angeltvnoticias.com: político, económico, relaciones exteriores y energético; lo que se traduce en al menos siete ministros, cuya gestión deberá ser revisada.

En lo político, Noboa tendrá que garantizar la gobernabilidad

Como contó Ecuavisa.com en un reportaje anterior, Daniel Noboa podría tener un escenario de gobernabilidad para el siguiente periodo, con base en las negociaciones que se cocinan en la Asamblea Nacional y la desarticulación del movimiento indígena.

El próximo Legislativo ya tiene 70 votos para el bloque oficialista y se espera que en los próximos días consigan más adhesiones.

En eso, será clave el Ministerio de Gobierno, por donde han pasado cuatro ministros: Mónica Palencia, Michelle Sensi Contugi, Arturo Félix y José De la Gasca, quien está actualmente en el cargo.

De la Gasca estuvo a cargo de la gobernabilidad a la par de la campaña electoral, enfrentando crisis como la sucesión presidencial a Verónica Abad.

En el próximo periodo, la principal tarea del titular de Gobierno será impulsar la Constituyente que Noboa propuso durante la campaña, con el fin de limitar los derechos de los presos. Concretar esa propuesta significará nuevamente ir a las urnas y medir su popularidad frente a la de sus opositores, el correísmo y el movimiento indígena, ambos debilitados.

Sin embargo, la politóloga Estefanía Luzuriaga dice que tampoco se puede subestimar la capacidad de movilización que tiene la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, liderada por Leonidas Iza.

En el ámbito político, el Gobierno también tiene que reforzar su comunicación oficial para evidenciar la gestión y desarticular a sus adversarios, por eso será vital que la Secretaría, que dirige Irene Vélez, consolide la imagen de un nuevo Gobierno.

Para Noboa, será un reto gestionar recursos y cuidar el fisco

El Ministerio de Economía tuvo dos cambios en dos meses. El primer titular fue Juan Carlos Vega, quien consiguió un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y estuvo en el cargo enfrentando decisiones como el alza del IVA del 12 al 15 % o la eliminación parcial de los subsidios a los combustibles.

Luego, por un periodo, corto estuvo Luis Alberto Jaramillo, quien pasó al Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca. Finalmente, asumió Sariha Moya, quien estuvo al frente de la Secretaría Nacional de Planificación y que sonaba para asumir ese cargo desde el inicio del Gobierno, en noviembre de 2023.

El economista Andrés Albuja cree que la cartera de Finanzas debe cambiar de modelo de gestión, tomando en cuenta que el país no ha logrado recuperar una senda de crecimiento económico. El Banco Central de Ecuador informó que 2024 cerró con una contracción del 2 %, a propósito de la crisis energética.

Albuja cree que es necesario mitigar los riesgos que pueda sufrir el país por la caída del precio de petróleo, a la par de buscar financiamiento en organismos multilaterales. Tampoco puede descuidar la generación de empleo o la posición de Ecuador frente al mercado global, a propósito de la guerra comercial.

En ese ámbito también es clave el Ministerio de Producción, ahora dirigido por Jaramillo, quien también tiene que concretar acuerdos comerciales con Canadá e incluso hay el interés de lograr acercamientos con Estados Unidos, a pesar de que esa no parece una prioridad para el gobierno de Donald Trump.

Noboa tiene que disminuir los índices de violencia al corto plazo

La inseguridad es la principal preocupación de los ecuatorianos, por lo que el Gobierno, al continuar con un periodo anterior, tiene que mostrar resultados al corto plazo.

En la cartera de Defensa está Gian Carlo Loffredo desde el inicio de la gestión. Ahí, el reto es mostrar resultados tras la visita de Erick Prince en Ecuador así como encaminar la propuesta de que operen bases militares extranjeras.

Por otro lado, el Ministerio del Interior, en manos de John Reimberg, ha mostrado mayor gestión en operativos como intervenciones en Socio Vivienda, en Guayaquil, o en hospitales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

De ambas carteras, Interior y Defensa, estará el garantizar el combate a las amenazas que aseguran que existen contra el presidente Daniel Noboa. Así como demostrar la importancia de una consulta popular que intervenga el ámbito de seguridad.

Noboa debe conservar sanas relaciones internacionales

Con el triunfo de Daniel Noboa, las felicitaciones de países como Estados Unidos, China, Rusia, entre otros, frente a la duda del proceso electoral de países afines al Socialismo del siglo XXI, como Colombia, México, Venezuela y Nicaragua, ubican al país en un momento favorable de sus relaciones internacionales.

Noboa busca un acercamiento con Estados Unidos, algo que incluso fue clave en su campaña de primera y segunda vuelta. El principal interés de Ecuador es mantener la cooperación en seguridad, así como alcanzar un acuerdo comercial con ese país.

Sin embargo, la internacionalista María Virginia Villacrés, dice que no se ha esclarecido cuáles son las intenciones de los acercamientos con Estados Unidos y qué tampoco se ha transparentado la información de los aportes de ese país.

Por otro lado, la analista explica que la canciller Gabriela Sommerfeld tiene una deuda en la negociación de la exoneración del visado Schengen para los ecuatorianos, que se complica aún más por los altos índices de migración.

Además, dice que no hay una clara política exterior, porque más allá de seguridad y acercamientos comerciales, no se ha incentivado la cooperación para temas sociales como la desnutrición crónica infantil.

Su gestión se vio marcada por la relación con la vicepresidenta Verónica Abad, a quien Noboa designó como embajadora en Israel y Turquía, poniéndola jerárquicamente bajo Sommerfeld; así como por la invasión a la Embajada de México, para capturar a Jorge Glas.